Criminales montaron un centro de monitoreo cerca de la UT y Hernán Bermudez y el Capi Merino nunca se dieron cuenta, vecinos acusan complicidad.
El ejercito decomiso hasta patrullas de Seguridad Pública y vehículos blindados que eran usados por los delincuentes.
CENTRO (CONTRASTE POLÍTICO).-Con el consentimiento del ex secretario de Seguridad y Protección Ciudadana de Tabasco Hernán Bermudez Requena y en las narices del gobernador Carlos Manuel Merino Campos, operaba un grupo de criminales en la entidad, tenían una Casa de Seguridad con C-4 en el kilometro 16 de la Villahermosa-Teapa, desde donde planeaban sus fechorías.
En las cercanias de la Universidad Tecnológica de Tabasco, la comandancia de la 30/a Zona Militar cateo un domicilio que se hacía pasar por un taller mecánico pero en realidad era una casa de seguridad de un grupo criminal, era vigilado por los policías locales pero nunca hicieron nada, hasta desayunaban con los presuntos criminales, relataron los vecinos.
Los militares decomisaron 34 vehículos presuntamente utilizados por la delincuencia organizada, algunos de ellos tenían reporte de robo e incluso localizaron una camioneta tipo patrulla de la Policía Estatal al parecer fue clonada.
También encontraron cuatro motocicletas, 1 arma corta, cargadores, municiones para diferentes tipos de armas, equipo táctico, dos predios usados por los delincuentes, una casa de seguridad que funcionaba como un centro de monitoreo tipo C-4 y un taller mecánico con vehículos robados.
El cateo fue informado por los militares que han tomado el control de Tabasco, en su operativo participó la Guardia Nacional y por varias horas la carretera Villahermosa-Teapa reportó trafico pesado por el desmantelamiento de esta casa de seguridad. Con este hecho el gobierno del Capi Merino quedó en evidencia que brindaba protección a los delincuentes que tenían su centro de mando a unos metros de su Palacio y de la Quinta donde vive.
En el lugar los vecinos se sorprendieron, pues informaron que nunca se imaginaron que el taller mecánico fuera utilizado por los delincuentes, pues en el lugar siempre hubo policías haciendo guardias las 24 horas por eso se sentían seguros.
“Yo veía que siempre había policías, llegaban camionetas con gente armada pero pensábamos que eran parte de la Secretaria de Seguridad Pública, pero ahora entendemos que estas personas estaban coludidas con el gobierno”. Testigo.
Uno de los informantes que prefirió omitir su nombre por temor a represalias detalló, “yo en una ocasión me detuve a comprar unos muebles con los poblanos que trabajaban a lado y observe que ese taller estaba lleno de policías, y hasta le traían comida a los que estaban ahí, eso me hace pensar que estaban coludidos”.
Destacó que los criminales estuvieron operando con el consentimiento de Hernán Bermúdez Requena y con el aval del gobernador, pues no encuentran otra explicación certera que les indique la razón por la que nunca se dieron cuenta de lo que sucedía en ese taller mecánico, donde hacían hasta guardias.
Este hecho muestra la sacudida que estará enfrentando el gobierno del Capi Merino para regresar la paz y tranquilidad en el 2024, tiempo de elecciones.
