México seguirá produciendo mano de obra barata y profesionistas desplazados por extranjeros.
Por Guillermo Manchado.
VILLAHERMOSA (CONTRASTE POLÍTICO).-Es duro decirlo, pero la Cuarta Transformación que encabeza el presidente Andrés Manuel López Obrador, esta llevando al país a la marginación educativa, un rezago que esta a la vista de todos y que sólo provoca mano de obra barata y empleados reemplazables.
De acuerdo a la prueba PISA 2022, México retrocedió a niveles similares a los de 2003. Hay una caída de (-)24 puntos en comparación con 2009 y de (-)14 en comparación con 2018.
Dos de cada tres estudiantes en México no alcanzan el nivel básico de aprendizajes en Matemáticas, obtuvo 126 puntos menos que Japón, el país mejor evaluado. Sin embargo, solo seis puntos separan a México de Colombia, el último lugar de la OCDE.
Estos números no deben extrañarnos, quienes conocemos los pueblos de México, sabemos que nuestros maestros siguen teniendo salones multigrados, el docente se parte en tres para impartir clases a niños de 4to, 5to y 6to grado.
Seguimos teniendo profesores mal pagados que, para poder cobrar sus quincenas, recurren al chantaje, a la movilización y al secuestro de unidades educativas. El gobierno sólo los tacha de revoltosos y los ignora de la vida pública.
El presidente de México Andrés Manuel López Obrador dice que no le importa esta prueba, porque quienes la elaboran son neoliberales “Fifís”, que no creen en su proyecto de transformación, ese mismo que dará continuidad Claudia Sheinbaum.
Señor presidente, lo invito a que enfrente la realidad no se esconda en la ignorancia, los resultados de la Prueba PISA reflejan un retroceso en su gobierno y peor aún, ante el mundo México quedamos como un país tercermundista que por su educación no podemos exigir un salario justo para nuestros profesionistas.
En el mundo de los negocios, los empresarios toman en serio este parámetro de la Prueba PISA para elegir los salarios que se le pagarán a sus profesionistas que contraten en sus industrias radicadas en México.
Así que hoy ante los ojos del mundo, seguimos siendo un pueblo formador de esclavos laborales que no tiene derecho a exigir nada y que su inteligencia seguirá marginada y desplazada por aquellos profesionistas que vienen a México a ganar como reyes por haber tenido la suerte de nacer en un país, donde la educación es prioridad.