CENTRO (CONTRASTE POLÍTICO).-La Villa Pueblo Nuevo era un lugar bonito, gozaba de árboles frutales, era una tierra bendita donde lo que se sembraba se daba.
Hoy todo eso es historia y ha quedado atrapada en medio de las fumarolas que arroja el campo Bakté, ubicado a orillas del rio de la Sierra.
Los nativos cuentan que si te daba hambre, tirabas el anzuelo y podías pescar un robalo, bobo escama o un macabil; cuando te daba sed cortabas un coco o una naranja, nada estaba contaminado, nada apestaba a petróleo y todo era bueno para la salud.
Las noches eran frescas, no se sentía el infierno que hoy viven por el fuego que arde día y noche en el campo Bakté uno de los más importantes y ricos que tiene Petróleos Mexicanos (Pemex) e incluso ha sido destacado como uno de los descubrimientos más relevantes de los últimos años, con reservas estimadas en 173 millones de barriles de petróleo crudo equivalente.
El campo Bakté, Pemex lo presume por todos lados, “nunca habíamos tenido un desarrollo tan rápido. Nunca en tan poco tiempo, desde la primera gota de aceite obtenida, se había logrado entrar en perforación de seis pozos, y es muy probable que de aquí a diciembre estemos con cinco o seis pozos en producción”, afirmó Octavio Romero Oropeza el agrónomo que estuvo a cargo de la gran petrolera mexicana.
Con todo el dinero que se están llevando de la explotación a la tierra y al subsuelo, les alcanza hasta para reubicar a toda la población, pero eso nunca pasará porque Pemex nunca piensa en los daños ni menos en los afectados.
En Pueblo Nuevo de las Raíces hay miedo, temen a que la contaminación afecte su salud, aunque han alzado la voz nadie los escucha, nadie quiere detener los millones que Pemex esta facturando a costa del sufrimiento de mil 800 pobladores que están asentados en esta Villa.
Han amenazado con cerrarle los accesos al campo petrolero, pero su temor a ser garroteados por el gobierno y sancionarles por delitos federales y estatales en que incurrirían con esas medidas, los detiene, por redes sociales se quejan pero nadie se atreve a dar el paso.
A través de redes sociales un afectado dice “Hago un atento llamado a toda la población, a su delegación y sus alrededores, como pueden observar hay un excesivo humo que proviene de los pozos, lo cual son por químicos que podrían ser dañinos para la salud de las personas, animales. Contaminación para nuestra agua y para la tierra, deberían darnos soluciones por todo esto, ya que aun largo plazo nos afectará”.
Aunque en el slogan del gobierno federal dice que primero los pobres, en la Villa Pueblo Nuevo no se aplica, pues aquí van primero los intereses de la nación a costa de la vida de los que menos tienen, esos que seguramente morirán lentamente y no estarán allí para ver el segundo piso de su llamada transformación.