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Tabasqueños buscan agua entre las piedras para no morir en la sequía.

Algunos ni pagando el dinero necesario pueden tener el vital liquido, como es el caso de pobladores de la Ranchería Pedro A Gonzalez de Macuspana, donde por más que buscan no encuentran.

JALAPA (CONTRASTE POLÍTICO).-El agua en Tabasco comienza agotarse, principalmente en las zonas rurales donde la última gota de la llave salió desde mediados de abril y hoy sobreviven buscando el vital líquido en charcos, arroyos, debajo de los cerros y hasta entre las piedras.

Jalapa es uno de los municipios que más sufre la sequía de este 2024, algunos pobladores han tenido que vender hasta sus animales de traspatios y usar sus ahorros para construir un pozo artesanal o profundo, con la esperanza de encontrar un manantial de agua que los refresque durante el estiaje.

 

Don Pablo Gómez Vázquez es un adulto mayor, uso su pensión del bienestar para construir un pozo profundo en el patio de su casa, aunque lo hizo austero se gasto $25,000.00 en una perforación de 35 metros.

Tan sólo el pozo profundo con medidas de tres pulgadas y con una profundidad de 35 metros tuvo un costo de $15,000.00, a esto se le suma el gasto de instalación que fue de aproximadamente otros $10,000.00 tomando en cuenta la mano de obra del eléctrico que lo hace funcionar, sin contar sus gastos a Villahermosa para conseguir el material eléctrico.

“El eléctrico me cobro $3,000.00 por instalarme una bomba sumergible, el cable que se usa fueron $1,800.00, otros $900.00 en gasto de manguera y entre otras cosas más, me salió carísimo, pero no tengo opción, el agua la necesitamos”.

Arturo Hernández quien se dedica a hacer pozos profundos, refirió que desde abril su carga de trabajo incremento, diario perforan y entregan un pozo por la falta del suministro que debería otorgar las autoridades municipales o estatales.

 

Junto a su equipo ya lleva perforado más de 50 pozos profundos entre las comunidades de Jalapa y Macuspana, ambas actualmente son golpeadas por la sequía y no sólo sufren las familias, sino también los cultivos, los animales vacunos y los de traspatios.

Quienes se animan a hacer su pozo de manera artesanal, se gastan hasta $50,000.00 para localizar agua, pero algunos ni pagando el dinero necesario pueden tener el vital liquido, como es el caso de pobladores de la Ranchería Pedro A Gonzalez de Macuspana, donde por más que buscan no encuentran.

En esta comunidad han perforado hasta 50 metros y no encuentran algún manantial de agua, los pobladores tienen que acarrear el vital líquido al hombro, a caballo y hasta en carretillas del Rio Puxcatán para sobrevivir a la peor sequía en la historia de Tabasco.

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