VILLAHERMOSA (CONTRASTE POLÍTICO).- En hecho inusual en Tabasco, por el método empleado, seis parroquianos de una deplorable cantina fueron asesinados con arma blanca y otros más resultaron heridos, entre ellos dos mujeres, en la Villa Benito Juárez, Macuspana.
La comunidad, con ascendencia indígena Chontal, también conocida como San Carlos, se ubica en el camino hacia Tepetitán, pueblo natal del presidente Andrés Manuel López Obrador, a 20 kilómetros.
Los hechos ocurrieron pasado el mediodía de ese jueves, cuando dos sujetos que llegaron y se fueron en motocicleta, ingresaron a la cantina y empezaron a atacar a los clientes que ingerían cervezas.
El gobierno del estado, hasta esta noche guardaba silencio sobre ese crimen múltiple, y se ignoraban los motivos de esa sádica matanza en el que las víctimas quedaron tiradas en medio de charcos de sangre.
La dantesca escena, en el interior de una casucha habilitada como cantina, la conformaba cuerpos tirados semidegollados, apuñalados y tirados sobre charcos de sangre.
Este día también, una persona fue victimada a balazos en la colonia La Escalera, también en San Carlos, en la carretera principal, frente a una gasolinera.
Antes, en otro punto opuesto y distante, sobre el acotamiento de la carretera federal Cárdenas-Huimanguillo, a la altura del poblado El Dorado, Huimanguillo, fueron tirados los cuerpos de dos jóvenes, atados de las manos y el tiro de gracia.
